Equipo informático y compromiso medioambiental y social.

Como ya os contamos, en Algadir Consultoría Alimentaria estamos fuertemente comprometidos con el medio ambiente, y también con la responsabilidad social de nuestras acciones empresariales.

 A principios de este año tuvimos que renovar parte de nuestro equipo informático, debido a que falló la placa base de nuestro ordenador de sobremesa. El viejo ordenador que moría, creado de piezas de otros equipos anteriores, dio sus buenos 7 años de servicio; no se le podía pedir más.


Por ello, a la hora de comprar nuestro nuevo equipo tuvimos en cuenta:

• Adquirirlo en comercio local, la tienda de informática "de toda la vida".
• Conservar operativo todo lo posible del viejo equipo. El mayor impacto ambiental de un ordenador proviene de su fabricación. Por ello decidimos quedarnos con todo aquello que aún funcionase, a pesar de que algunas ofertas de paquetes completos resultaban más baratas.
• Por supuesto, también hemos conservado nuestro monitor LCD, que cumple las especificaciones Energy Star americanas sobre bajo consumo energético.
• Escogimos un microprocesador y una placa base con tarjeta gráfica integrada no demasiado exigentes, puesto que son los dos elementos con mayor consumo energético dentro de la CPU.

Inevitablemente esta renovación de equipos generó los consiguientes residuos; tecnochatarra sin más utilidad para la empresa, pero con un alto potencial contaminante debido a su contenido en metales pesados, ya que algunos de ellos probablemente se fabricaron antes de la normativa RoHS.

Depositamos en el punto limpio todos los elementos que ya no funcionaban y regalamos aquellos que todavía lo hacían pero no eran ya compatibles con la nueva placa base.
Aún nos quedan 2 tarjetas de memoria RAM y un procesador para los que seguimos buscando un nuevo dueño ¿Te interesan?

 

Y en el futuro ...

Parece ser que un ordenador esta operativo como media entre 3 y 5 años. Confiamos que nuestro nuevo equipo llegue sin problemas hasta el 2019 y más allá.

Otro asunto es el de la impresora láser, que es una devoradora de energía y tóner. Se niega a terminar los cartuchos, demandando su sustitución cuando todavía le queda "tinta" y tampoco imprime en blanco y negro cuando tiene agotado alguno de los cartuchos de color.
Este componente díscolo de la empresa, que no cumple con nuestro compromiso ambiental, con el tiempo (¡esperemos que dentro de mucho!) será sustituido.